PDVSA Ad Hoc resalta avances en la defensa de los activos de CITGO

La Junta Administradora Ad Hoc de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA Ad Hoc) informa a la opinión pública venezolana, a la comunidad internacional y a todos los interesados, sobre los importantes avances y diferencias significativas en la gestión y defensa de los activos de CITGO desde su establecimiento en 2019, a la luz de la campaña nacional e internacional desplegada por el régimen de Nicolás Maduro que busca hacer del caso de CITGO, un tema de campaña electoral y de persecución política, para distraer la atención sobre seis años de usurpación del poder, su rotundo fracaso económico en la conducción del país, y su contribución directa por más de 11 años en la destrucción de la industria petrolera venezolana con casos tan emblemáticos como los $23,000 millones de dólares desaparecidos en el caso de PDVSA crypto, presumiblemente orquestado por Tarek El Aissami quien por muchos años, fue aliado de Nicolás Maduro.

Comenzaremos por recordar que, el 2 de febrero de 1999, Hugo Chávez recibió un país que producía 3 millones 450 mil barriles de crudo por día, de los cuales 2 millones 850 mil barriles diarios eran producidos por el esfuerzo propio de PDVSA, mientras que el resto era aportado por los Convenios Operativos y Asociaciones Estratégicas de la Faja del Orinoco, ambos negocios estuvieron en pleno crecimiento, pero fueron arrasados por las acciones y las creencias ideológicas del régimen.

El plan de negocios de PDVSA estimaba un crecimiento significativo, a realizarse de manera conjunta con los aportes provenientes de la Apertura Petrolera, vale decir Convenios Operativos, Asociaciones Estratégicas y Exploración-Producción a Riesgo, bajo el esquema de Ganancias Compartidas, lo cual permitiría alcanzar a Venezuela una producción de unos 6 millones de barriles de crudo a mediano plazo.

Adicionalmente resaltaremos el tema que nos ocupa: La Internacionalización, en general y CITGO, en particular.

Para el inicio del año 2000, esta era de manera resumida la situación:

• Capacidad de Refinación Internacional: 1 millón 500 mil barriles de crudo por día.
• Comercialización Internacional de productos superior a los 2 millones de barriles por día.
• Acceso al sistema de venta directa de combustible en estaciones de servicios: CITGO tenía el 10% del mercado de EEUU con 13.997 estaciones y 2.000 estaciones Aral en Alemania cubriendo el 17% del mercado alemán. Vale decir que en Europa PDVSA tenía 4 refinerías en Alemania, 2 refinerías en Bélgica, 2 en Suecia y 2 en el Reino Unido.
• CITGO era líder en la producción y suministro de asfalto en la Costa Este de los Estados Unidos.
• Con relación a CITGO, solamente, en EE.UU. PDVSA contaba con 6 refinerías propias; 13.397 estaciones de servicio; 55 terminales y amplia participación en poliductos; además de otra amplia participación accionaria en Hovensa (St. Croix-Hess); Merey-Sweeny (ConocoPhillips); Chalmette (Exxon-Mobil) y CITGO-Lyondell.

Para culminar esta fase, presentamos la situación para el 2018, de modo que puedan sacar sus propias conclusiones, sobre quiénes y cuándo desmontaron la Internacionalización petrolera venezolana, incluyendo, por supuesto a CITGO en EE. UU.

• Sistema Europeo vendido por la PDVSA de Maduro (rematado) y reducida la participación en Suecia al 15%, por un precio no revelado con total falta de transparencia.
• Citgo-Lyondell vendido por el régimen en $1.800 millones de dólares netos.
• Chalmette entregado por el régimen como parte del pago a Exxon por demanda de expropiación de la Asociación Cerro Negro.
• El régimen vendió las participaciones de Venezuela en los poliductos Explorer/Eagle/Colonial por $1.000 millones.
• Hovensa quedó fuera de operación en 2012 tras declararse en quiebra- y vendidas las instalaciones de terminal y almacenaje en $184 millones. Compromiso de pago de deuda de Hovensa a Hess y PDVSA ($1.860 millones).
• Citgo Asphalt fue vendida por el régimen a NuStar (2007) en $848 millones.
• Merey Swenny: ConocoPhilips tomó control definitivo de la empresa por incumplimiento del contrato de suministro (2015) – Conoco además asumió la deuda de PDVSA ($195 millones).
• También destaca la venta y pérdida de los Terminales de almacenamiento en el Caribe (BORCO-BOPEC)

Como resultado de este desmontaje, tan solo quedaron 3 refinerías de CITGO (Lake Charles, Lemont y Corpus Christi) y menos de 4 mil estaciones de servicio, propias y abanderadas que fueron recibidas en 2019. Actualmente, la producción total de petróleo de Venezuela, a duras penas, supera los 800 mil barriles diarios de manera sostenida, lo cual contrasta con los 3 millones 450 mil barriles diarios de producción que recibió la gestión de Hugo Chávez en 1999.

Sin duda alguna, la destrucción de la infraestructura internacional y nacional de PDVSA y el sector petrolero nacional, solo comprueba lo que hemos venido afirmando por años. Esto fue un plan orquestado por el régimen para acabar con Venezuela.

Desde que CITGO fue recuperada en el año 2019 por la Junta Ad Hoc de PDVSA, se ha trabajado para protegerla de esta debacle. CITGO se encontraba con una deuda de 4.800 millones de dólares, saqueada e hipotecada por el régimen de Maduro que, además, había entregado en garantía el 49.9% de las acciones a la empresa rusa Rosneft, y el 50.1% de las acciones a los tenedores de bonos de PDVSA 2020. La compañía se encontraba refinando menos de 750,000 barriles diarios de crudo, con una altísima desinversión en seguridad y operaciones, y bajo una investigación judicial por actos de corrupción que a la fecha alcanzan al menos 47 casos públicos en que la mayoría de los acusados se han declarado culpables en cortes de los EE. UU.  Este fue el legado del régimen que había intentado vender lo que quedaba de la compañía en el año 2016, y fracasó en ese intento.

Habiendo superado los malos años del mercado refinador durante la pandemia global entre 2020 y 2021, la nueva administración de PDVSA ad hoc ha llevado a la empresa a la recuperación de sus refinerías, la optimización de sus procesos y el incremento del negocio en los mercados, lo que nos ha llevado a obtener ganancias en los últimos 10 trimestres que acumulan casi 5.000 millones de dólares, logrando salir del endeudamiento en que había sido subsumida la empresa, recuperando por otra parte la garantía del 49.9% de las acciones otorgada a la empresa rusa Rosneft, e incrementado la capacidad de refinación a 850.000 barriles diarios de crudo, lo que es mucho mayor a la cantidad de crudo que produce hoy la PDVSA roja. Todo esto ha contribuido a que el valor de mercado de CITGO haya aumentado significativamente. Por lo tanto, existe un gran contraste en la gestión y los resultados. Una gestión que buscó hipotecar la empresa y drenarle sus recursos para ser dilapidados por un régimen autoritario, y una nueva gestión que ha logrado recuperar a CITGO financiera y operativamente.

Mientras se trabajaba en la recuperación de CITGO, PDVSA Ad Hoc y las empresas filiales, han trabajado de manera conjunta con el Gobierno Interino y la Asamblea Nacional Legal de 2015, en su protección jurídica contra la ejecución de acreencias causadas durante los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. La práctica irresponsable del “¡exprópiese!”, los impagos e incumplimientos de contratos, han dejado un legado de deudas superior a 24.000 millones de dólares que acechan a la compañía, y que representan una seria amenaza en un proceso de venta que se lleva a cabo en las cortes tribunalicias de Delaware. Cabe destacar que más del 80% de la deuda que reclaman los acreedores no es de PDVSA ni de CITGO, sino que fue generada durante las administraciones de Maduro y Chávez.

Cabe aclarar que dicho proceso, si bien se encuentra avanzado, no ha concluido. PDVSA Ad Hoc ha declarado públicamente sus críticas a un proceso que no cumple con principios de justicia y equidad. Esto ha despertado el apoyo bipartidista en el Congreso de los EE. UU. por congresistas que han solicitado la suspensión del proceso y la creación de una Comisión Especial de Resolución de Acreencias, como han existido en el caso de otros países como Irak, Sudán o Cuba.

PDVSA y la República todavía tienen derecho a recursos legales que legítimamente pueden ejercer contra el resultado del proceso de venta y apelaciones ante la Corte del Tercer Circuito y la Corte Suprema de los EE. UU. Todo esto es posible antes de que el proceso judicial se dé por concluido, y quede la protección final en la decisión del Departamento del Tesoro de los EE. UU.

Por lo tanto, es importante informar que la situación de CITGO aún no ha llegado a su fin, como está tratando de hacer creer el régimen de Maduro y algunos colaboracionistas, en un nuevo intento de engañar y manipular a la opinión pública nacional e internacional.

La compleja situación de endeudamiento causado mayoritariamente por incumplimientos de pago del régimen rojo rojito y no de CITGO, requiere una solución que pasa por el respeto del Acuerdo de Barbados, y el desarrollo de elecciones libres el 28 de julio de 2024, que permitan la oportunidad de que un gobierno legítimo y reconocido internacionalmente sea capaz de reestructurar la deuda del nefasto legado de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. La resolución del problema de la deuda es una tarea a la que se debe abocar toda empresa nacional y el gobierno legítimo. Estos, deben dar los pasos apropiados para que la deuda sea reestructurada. Es un asunto clave para lograr la reactivación de la economía y el regreso de inversiones a Venezuela.

El no respeto al Acuerdo de Barbados y acciones que promuevan un evento electoral fraudulento encontrarán rechazo internacional, hará muy difícil reestructurar la deuda, incrementará el éxodo de venezolanos y se traducirá en mayores violaciones a los derechos humanos, todos estos hechos frente a la oficina de la Corte Penal Internacional ya instalada en Venezuela.

Ante este escenario, no debería existir dilema alguno ya que es más conveniente para todos encontrar una solución electoral y civilizada a la situación que vive el país y avanzar hacia un futuro mejor para todos los ciudadanos aprovechando las potencialidades de Venezuela.

La Junta Administradora Ad Hoc de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA Ad Hoc), reafirma su compromiso con la defensa de los activos de CITGO de manera legítima y transparente. Agradecemos el continuo apoyo de la comunidad nacional e internacional, de los medios de comunicación y reafirmamos nuestro compromiso de seguir trabajando con transparencia para proteger los intereses de Venezuela. Esta gestión y los resultados obtenidos demuestran un cambio significativo en la dirección y administración de los activos.

Agradecemos su atención y apoyo continuo en esta lucha por la justicia y la transparencia.