Ana K. Cárdenas: La importancia de establecer objetivos claros y medibles
En el mundo corporativo, tan acelerado y competitivo, es esencial tener una visión clara de hacia dónde nos dirigimos. Como bien dice el dicho, no se trata solo de alcanzar el éxito, sino de saber cómo llegar a él.
Una vez un cliente llegó a nuestra oficina con una energía contagiosa y un torbellino de ideas. Estaba ansioso por comenzar a trabajar en su proyecto y tenía grandes expectativas sobre lo que podíamos lograr juntos, pero sus objetivos estaban dispersos.
Como equipo sabíamos que para lograr resultados tangibles necesitábamos un plan claro y enfocado.
Así que nos sentamos con él y, a través de una serie de conversaciones estratégicas, con escucha activa y mucha retroalimentación, logramos organizar las ideas y a definir objetivos SMART: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con plazos determinados.
Fue un proceso de descubrimiento mutuo, donde le mostramos cómo establecer objetivos claros no solo le daría dirección, sino que también nos permitiría crear un plan de acción efectivo.
Los objetivos bien definidos nos brindan dirección, enfoque y una forma de medir nuestro progreso. Además de que nos ayudan a motivar al equipo y a tomar decisiones informadas.
Al final de cada proyecto siempre concluimos lo mismo; tener objetivos claros es como tener un mapa de una aventura empresarial: te muestran el camino y te ayudan a llegar a tu destino.