Luis Perozo Cervantes: “Un libro debe costar lo que cuesta una caja de cerveza”
Por: EduardoChapellín
«Nuestros libros en general cuestan 18 dólares, porque tenemos una teoría: yo siempre digo que un libro debe costar lo que cuesta una caja de cerveza. Es decir, si tienes para comprarte una caja de cerveza, tienes para comprarte un libro”, señaló sin titubear Luis Perozo Cervantes, editor de Sultana del Lago Editores.
Perozo profundizó este punto al aclarar que “los 18 dólares es la cifra coincide con el costo promedio que debe tener un libro con el costo de producción. Es decir, lo que te cueste producir el libro, el libro tiene que tener un precio de venta que sea el cuatro veces lo que cueste producirlo. Relativamente, ese es el precio en el cual debe venderse un libro… Es decir, que lo de la caja de cerveza es un poquito de coincidencia, pero es una forma de hacerlo divertido. Claro está, también hay libros de quince o diez dólares”.
Y en la reciente Feria Internacional del Libro (Filven) 2024, que se celebró en la Galería de Arte Nacional (GAN) en Caracas, presentaron tres novedades editoriales: «A Manuel Salazar, un joven de 22 años que publica su primera novela. También un libro de fotografía que se llama Lo que dejaron del fotógrafo del zuliano Federman Parra. Y tenemos el libro de dramaturgia de Roma Rapa que se llama Pesquisas extraviadas”.
Recalcó que estas son las últimas publicaciones en la trayectoria de esta casa que ya acumula más de 400 textos, “de nuestra editorial que está arraigada en Maracaibo (estado Zulia), pero publica para todo el país, ya que somos una editorial multiplataforma de impresión bajo demanda. Es decir, publicamos en todas las plataformas de comercio de libros del mundo: Amazon, Google Play Books, diferentes tipos de papeles y diferentes tipos de plataformas, donde tengamos nosotros la oportunidad de promover los autores venezolanos y, en especial, los zulianos”.
Sin embargo, para esta feria realizada en la GAN y en otras donde participa esta casa, los precios son de hasta cinco dólares, “porque en las ferias vienen los lectores. Y los lectores recomiendan libros. Entonces la persona que se lleva un texto le va a recomendar a otra persona para que lo compre. Y ese otro, qué si es el cliente final, lo va a comprar en una aplicación; o lo va a comprar en Amazon, o lo va a pedir en una librería”.
“También hacemos impresiones de libros. Es decir, tenemos un pequeño taller en el cual hacemos la edición casi artesanal de libros, donde sacamos cinco o 10 ejemplares de los que se necesiten para que con el libro, a pesar de estar en la era digital, la gente nunca pierda contacto con el papel”, precisó este zuliano.
Esta insistencia se debe a que “mucha gente dice que el libro lo tiene que ojear, sentir, para poder sentirlo físicamente, porque leen por computadora o leen por redes sociales. Para las nuevas generaciones eso ya no es un problema, pero tenemos que entender que los cambios no se van a dar de un día para otro, que tenemos que trabajar con el relevo generacional y que muchos quieren coleccionar un libro”.
Esta editorial nació el 29 de noviembre del año 2013 “y mira, editamos en todas las áreas. Hemos editado poesía, hemos editado dramaturgia, temas de salud, narrativa. Tenemos textos sobre educación, sobre ciencias sociales… todas las áreas”.
– ¿Así que ustedes están abiertos a todas las tendencias?
– Y además hacemos algo que las personas no están acostumbradas a saber. Nosotros publicamos los libros a través de una recepción de manuscritos. Cualquiera puede enviarnos sus manuscritos, y si nos parece bueno, lo publicamos. La idea es que consigamos lectores, porque el problema de las editoriales que han proliferado es que tienen como clientes al autor. Entonces, autores hay pocos, lectores hay millones. Tenemos que construir lectores, y para eso necesitamos conseguir buenos autores. No es como en tutoriales, que tú tienes que pagar para que te lo publiquen. Aquí lo que tienes que tener es talento, si lo tienes, concursas.
“Pero también pasa que si tienen cobre y quieren publicar contigo, es un negocio y también ofrecemos servicios editoriales, sobre todo de corrección, de decir cosas puntuales que vienen al desarrollo del proceso editorial. Si yo te quiero publicar, me lo dices si tenés el plan, hacemos impresión bajo demanda. Si necesitas sacar 500 o necesitas sacar cinco, bueno te damos el costo del libro y esto es lo que cuesta imprimirlo. No necesariamente ese libro tiene que estar en nuestro sello editorial, ya que solamente estamos presentando el servicio de impresión”, aclaró rápido.
Cuando se le inquirió si como en el caso de Cien años de soledad de Gabriel García Márquez y la editorial Suramericana, que se atrevió a publicarlo por primera vez, en el caso de Sultana del Lago Editores están en la búsqueda del bestseller que los catapulte, no dudó al responder: “Claro que estamos buscando el libro que nos permita dar a conocer el resto de los libros. Es la especie de búsqueda de oportunidades dando oportunidades”.
De los libros que han editado, “mira, tenemos un libro muy querido por nosotros, que es el Diccionario General del Zulia, el más importante que se ha escrito sobre la historia del Zulia. Son cuatro tomos gigantescos de toda la historia del Zulia. Y se ha movido la venta y lo publicamos en 2018, pero es el libro que más ha vendido ejemplares en nuestra editorial; inclusive fuera fuera de la República del Zulia. Es un libro costoso, que vale más de 100 dólares porque son cuatro tomos de 600 páginas cada uno. Son más de 2.400 páginas de historia”.
También publican libros harto conocidos: “Por ejemplo, tenemos El Principito y no es porque publiquemos libros clásicos, sino que ese es un proyecto de una joven ilustradora zuliana, de un talento venezolano que se llama Fabiola Bermúdez. Es un libro que está libre de derechos ya, porque el autor (Antoine de Saint-Exupéry) tiene más de 100 años de haber nacido, y tiene ilustraciones de una venezolana que son bellísimas. Es una reinterpretación de la ilustración clásica de El Principito”.