«Decodificar lo invisible» de Juan Carlos Hernández, inauguró en la galería del Hotel Tamanaco
El artista visual e infógrafo Juan Carlos Hernández inauguró Decodificar lo invisible. Esta es su tercera exposición individual con este proyecto de piezas que, en esta ocasión, llega a la Galería Tamanaco ubicada en los espacios del Hotel Tamanaco. La propuesta que se exhibe nace de la curiosidad y la investigación del artista, quien en su proceso creativo se mueve entre los datos, la expresión geométrica y la percepción humana. A través de cada obra revela cómo la información oculta, tras los números, ofrece datos que él ha optado por transformar en una experiencia artística, vibrante y emotiva.
Para Hernández, esta exposición marca un momento clave en su trayectoria: “La miro y la aprecio como una nueva oportunidad para llegar a más personas con mi propuesta. El hecho de que el público pueda conocer mi trabajo es algo por lo que siempre estaré agradecido». Bajo el concepto de Decodificar lo invisible, el artista invita al espectador a explorar lo que yace tras los datos fríos, que él ha convertido en un lenguaje visual, para despertar sensaciones y reflexiones.



Sinergia creativa
La muestra incluye seis piezas nuevas, diseñadas para adaptarse a la arquitectura exigente de la galería: “He creado estas obras para no perder el hilo conductor de Decodificar lo invisible. La galería, por su extensión y estructura, puede resultar intimidante al principio. Pero, eso mismo me motivó a explorar composiciones que dialoguen con el espacio, sin sacrificar la narrativa central”, explica Hernández. Las piezas, que fusionan datos cuantitativos con una geometría audaz, destacan por sus paletas cromáticas intensas y las escalas monumentales, que desafían la percepción tradicional de lo «visible».
Al compartir cómo es su proceso creativo, el artista enfatiza: “Siempre la data que está detrás de los gráficos y de las formas geométricas es la que me inspira sobre el uso del color y su aplicación. La vibración que me transmita, al momento de trabajar, también influye”. Esta sinergia entre análisis riguroso e intuición artística define el estilo de Hernánez, quien traduce las tablas numéricas en composiciones que oscilan entre el orden matemático y la expresividad orgánica.



Decodificar lo invisible se alinea con tendencias globales como las esculturas tejidas de Nathalie Miebach o los proyectos Unfiltered.News (Martin Wattenberg), para demostrar que el arte puede hacer accesible lo complejo. “No se trata solo de mostrar datos, sino de crear puentes entre lo abstracto y lo emotivo”, subraya el artista.











