Osvaldo Virgil logró cuatro cetros como mánager en Venezuela
Por: Eduardo Chapellín
Osvaldo José Virgil Pichardo, mejor conocido como Ozzie Virgil y quien fue el primer dominicano en debutar en Grandes Ligas, falleció en su natal Monte Cristi a los 92 años.
“Siempre me he sentido agradecido y dichoso por haber sido escogido por Dios para abrir las puertas de mis compatriotas en las Grandes Ligas, tomando en cuenta que cientos de otros mejores que yo no recibieron esa oportunidad”, citó Virgil en una entrevista hace años, recordando el 23 de septiembre de 1956, cuando a los 24 años jugó en la tercera de los entonces Gigantes de Nueva York e irse de 4-0 ante Filis de Filadelfia.
«Todavía hoy puedo recordar cómo la sangre corría aceleradamente por mis venas y la adrenalina casi me ahoga el primer día que jugué en las Grandes Ligas», agregó Virgil en conversación con Enrique Rojas de ESPN, durante el medio siglo de aniversario por su llegada a MLB.
Fue un versátil utility y jugó todas las posiciones, menos de pitcher. Virgil bateó .231 con 14 jonrones y 73 remolques en nueve zafras (1956-1969) con Nueva York, Detroit, Kansas City, Baltimore, Pittsburgh y San Francisco.
Por cierto, el 6 de junio de 1958 se convirtió en el primer negro en militar con Tigres de Detroit. El 19 de junio de ese año contra Senadores de Washington fue el primer dominicano en conectar cuatro sencillos y un doble en un careo.
Su hijo, Ozzie Virgil Jr., también jugó en la MLB, durante once campañas como receptor con Filis, Bravos y Azulejos.
Apodado cariñosamente como “El Orégano” y “El Pionero”, en la pelota quisqueyana, jugó con Leones del Escogido y Águilas Cibaeñas entre 1955 y 1970. Ganó el MVP de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (Lidom) en la justa 1956-57, alzándose con el título de bateo esa misma zafra. En 1984 fue exaltado al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
Luego de retirado, pasó 19 años como técnico en San Francisco (1969-72, 1974-75), Montreal (1976-81), San Diego (1982-85), y Seattle (1986-88). De 1977 al 1988 se desempeñó como coach de tercera base junto al Salón de la Fama y exmánager Dick Williams.
Sin embargo, Virgil siempre será recordado en la pelota rentada venezolana por ser un mánager ganador, desde su debut en la 72-73 con Leones del Caracas, a los que llevó al título y a la Serie del Caribe, que se jugó precisamente en nuestra capital. Pero también fue el capataz de los dos títulos conseguidos por Tigres de Aragua en lo torneos 74-75 y 75-76. Y en la 82-83 coronó a Tiburones de La Guaira, siendo uno de los pocos estrategas con cetro con tres clubes diferentes.
También dirigió a Cardenales de Lara por dos campeonatos. Y volvió con los escualos en las campañas 91-92 y 92-93, siendo sus últimas en la pelota rentada venezolana.
En general, fueron doce las temporadas que dirigió Virgil en la LVBP: una con Leones, cinco con Tigres, cuatro con Tiburones y dos Cardenales. Pasó a postemporada nueve veces.