Arte y Cultura

Alfredo Anzola: “No me considero un dictador como director”

Por: Eduardo Chapellín

Alfredo Anzola es un cineasta y cinematógrafo venezolano nacido en CaracasDistrito Capital, el 17 de junio de 1946. Anzola es un prolífico director cuya obra incluye Se solicita muchacha de buena presencia y motorizado con moto propia (1977), Manuel (1979) y Cóctel de camarones (1984)..

“Sobre la inteligencia artificial sólo te puedo decir que las cosas cambian a una velocidad tal que no sabes qué pueda pasar. No me sorprendería que un día que el director de una película fuera una máquina, pero no me gustaría. La tecnología está avasallando al ser humano y la creatividad”, señaló Alfredo Anzola, uno de los homenajeados del II Festival de Cine Cumbe San Agustín, que desde este lunes y hasta el siete de octubre, se celebrará de manera gratuita en varias salas de Caracas.

“Me encanta que se están haciendo muchas películas por jóvenes que no conozco. Los felicito porque las están haciendo en situaciones adversas, porque debido a la crisis económica no hay financiamiento. Pero a pesar de esto, se demuestra que el cine venezolano tiene su propia fuerza”, agregó el director de cintas como Manuel,  Cocktail de camarones  y Más vivos que nunca.

Sobre la parte técnica actual, acotó que “hace que filmar sea de más calidad. Y se nota también en la postproducción que ha mejorado mucho. Antes era bastante precaria”.

“No me considero un director dictador, porque hice una pasantía en Polonia con Andrzej Wajda. Y una de las cosas que aprendí con él, es que agarraba y se iba caminando con los actores y conversaba sobre los guiones. Y cuando volvía, en vez de decir acción, decía por favor. Eso me marcó”, finalizó el homenajeado.

Cuando se le inquirió cómo ve el cine venezolano que se realiza actualmente, precisó que «no he visto mucho cine a raíz de la pandemia porque ahora salgo poco. Eso sí, me encanta que se están haciendo muchas películas de jóvenes que no conozco. Los felicito porque están haciendo películas en situaciones adversas, porque debido a la crisis no hay financiamiento del Estado. Pero a pesar de esto, se demuestra que el cine venezolano tiene su propia fuerza».

 A LO CRIOLLO

Considera que nuestro cine «es una industria establecida a su manera, al estilo venezolano (risas)».

Admitió que «nunca he estudiado cine, pero aprendí haciéndolo».

Para él, seleccionar su mejor película, «es una pregunta muy difícil de contestar. Es como el hijo que más quieres, porque cada cinta ha sido una experiencia distinta y siempre la última que uno estrena, es la máxima felicidad. No te puedo decir la que más quiero. Realmente todas significan mucho para mi. Te puedo seleccionar algo bueno de cada una, pero no escogería una en particular».

«Tengo un guión que lo hice con Olegario Barrera a distancia, pero ya tiene varios años. Es una película que se llama multiservicios confidenciales que trata sobre el país, que tiene una sonrisa, pero al contrario de mis otras películas, es un poc más dura. Trata sobre la vagabundería que existe», precisó Anzola sobre su préximo proyecto cinematográfico.

Volviendo a l festival y contando con la organización de 100% San Agustín, las cintas con entrada libre estará en las salas Carlos Orta del teatro Alameda, Margot Benacerraf en Unearte, Antonieta Colón del Centro Cultural Parque Central, Cinemateca Nacional (Museo de Bellas Artes), Manuelita Sáenz en el teatro Bolívar y los espacios abiertos del Nuevo Circo de Caracas, en barrio La Agricultura en Petare, con el apoyo de Zona de Descarga, Longaray en El Valle, plazoleta de El Afinque de Marín, La Fila, Hornos de Cal y Pasaje 8 en San Agustín.

Este festival se realiza gracias al patrocinio del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), la Embajada de España en Venezuela y la empresa de telecomunicaciones Vnet, en alianza con Centro Cultural Parque Central, Fundación Nuevo Nuevo Circo, Parque Cultural Tiuna el Fuerte, Zona de Descarga, Cinemateca Nacional de Venezuela, Frente Francisco de Miranda, Oz Shows, de las también las embajadas de Suiza, Francia y Argentina  en Venezuela, el Goethe Institut, Amazonia Films, Historias que Laten, agencia Ghetto Photo.

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