Economías de América Latina crecerán poco en 2023 y 2024
Información IPS Venezuela
La economía de la región crecerá apenas 1,7 por ciento este año y dos décimas menos en 2024, bajo el peso de un panorama económico mundial negativo y regional muy complejo, indicó este martes 5 la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Además ese bajo crecimiento “se puede ver agravado por los efectos negativos de una agudización de los choques climáticos, si no se realizan las inversiones en adaptación y mitigación al cambio climático que requieren los países”, señaló el secretario ejecutivo del organismo, José Manuel Salazar-Xirinachs.
Según la Cepal, la dinámica de la economía mundial se mantiene en una senda de bajo crecimiento económico y del comercio global. Por ejemplo, las economías avanzadas con las que interactúa la región crecerían 1,5 % en 2023, muy por debajo del 2,7% de 2022, y su crecimiento el año próximo no pasaría de 1,4 %.
El comercio mundial crecería 1,7 % en 2023 y 3,2 % en 2024, todavía por debajo de registros históricos.
Y, a pesar de las caídas en la tasa de inflación, probablemente los países desarrollados seguirán con sus políticas monetarias contractivas, por lo que no cabe esperar una baja significativa en las tasas de interés externas durante este año, y los costos de financiamiento para los países de la región seguirán altos.
La deuda pública regional, si bien ha bajado, permanece en niveles elevados respecto al producto interno bruto (49,5 % del PIB), lo que, junto al aumento de las tasas de interés y a una caída esperada de los ingresos tributarios producto del menor crecimiento, lleva a un limitado espacio fiscal para el conjunto de la región.
“El bajo crecimiento de América Latina y el Caribe se puede ver agravado por los efectos negativos de una agudización de los choques climáticos, si no se realizan las inversiones en adaptación y mitigación al cambio climático que requieren los países”: José Manuel Salazar-Xirinachs.
El Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2023, uno de los principales informes que publica la Cepal desde sus inicios en 1948, también anticipa un menor dinamismo en la creación de empleo, y crecientes demandas sociales.
Aunque el empleo se ha recuperado con la normalización de las actividades económicas tras la pandemia covid-19, en el primer trimestre de 2023 solo el número de ocupados en el sector servicios experimentó un crecimiento, de 4,1 %, y también fue el único sector que superó los niveles de ocupados del cuarto trimestre de 2019.
Para 2023, la Cepal proyecta que todas las subregiones exhibirán un menor crecimiento respecto de 2022: América del Sur crecería 1,2 % (3,7 % en 2022), el grupo conformado por Centroamérica y México 3,0 % (3,4 % en 2022), y el Caribe (sin incluir Guyana) 4,2 % (6,3 % en 2022).
Guyana, que experimenta un boom de inversiones y producción petrolera desde finales de la década pasada, presenta los mejores números, con un crecimientom esperado de 25 % este año y 20 % el próximo, niveles sin embargo inferiores a los de años inmediatamente precedentes.
En América del Sur, las cifras positivas para 2023 y 2024 son de 4,2 y 4,0 % en Paraguay, 3,2 y 2,7 % en Venezuela, 2,5 y 1,4 % en Brasil, 2,3 y 2,6 % en Ecuador, 2,2 y 2,1 % en Bolivia, 1,3 y 2,5 % en Perú, 1,2 y 1,9 % en Colombia, y 1,0 y 2,6 % en Uruguay.
La recesión afecta a Argentina (-3,0 y -1,6 % en 2023 y 2024) y a Chile (-0,3 este año, aunque se recupera 1,8 % el próximo).
México crecerá tres por ciento este año y 2,1 % el próximo; Panamá, 5,1 y 4,2 %; Costa Rica 3,8 y 3,4 %; República Dominicana 3,7 y 3,0 %; Cuba 1,8 y 1,7 %; El Salvador, Guatemala y Honduras están en rangos entre 1,8 y 3,4 %, mientras que Haití estará en recesión (-0,7 %) este año y puede crecer 0,8 % el próximo.
El conjunto del Caribe de habla inglesa (excluida Guyana) y Suriname crece 4,2 % en 2023 y 2,8 % en 2024. Los mejores desempeños se prevén para Antigua y Barbuda (9,5 y 8,5 %), Jamaica (5, 3 y 2,2 %) y Granada (5,0 y 3,5 %).
Finalmente, el estudio advierte que los impactos macroeconómicos del cambio climático podrían ser muy significativos para los países de la región, y proyecta que en 2050 podrían tener un PIB entre nueve y 12 % menor al de un crecimiento tendencial si no se invierte para compensar los choques climáticos.
El volumen de inversión adicional requerido con ese fin “es excepcionalmente grande, entre 5,3% y el 10,9% del PIB por año”, es decir, entre 125 000 y 240 000 millones de dólares, pues el Banco Mundial estima que el PIB regional totaliza 4,25 billones (millones de millones) de dólares.