Las chef Patrizia y Matilde Veneziano: «La vida no es para llevar, es para comer aquí»
Por: Eduardo Chapellín
«Algún plato con dificultad, no. Realmente cuando uno cocina con pasión basta seguir este recetario donde explicamos todo paso a paso y lograrán que la recta salga tal como está escrita», señaló Patrizia Veneziano, quien junto a su hermana Matilde bautizaron un didáctico pero muy bien presentado recetario «Sabores que palpitan en la memoria».
El libro de 123 páginas se divide en cinco secciones ilustradas con fotografías de Natalia Brand. La primera parte del texto está dedicada a los entremeses y los contornos, la segunda a la pasta. En la tercera parte se abordan los platos principales y en la cuarta los postres. En la última sección las hermanas comparten imágenes del álbum familiar por la «Siracusa de Emanuele».
Matilde agregó que la receta que más le gusta hacer es la pasta che sadde o pasta con sardinas; y las dificultosa por su preparación y todo el tiempo que se lleva son los arancini y también la carbonata. No es por lo exigente sino por lo largo en tiempo».
Ambas ratificaron que se están respetando «las recetas originales y autóctonas por cada ingrediente y cada receta. Lo que si tiene algo de distinto son los dulces porque quisimos hacer prácticamente una fusión también de nuestro origen venezolano, entonces no todos los dulces son italianos, sino que vienen también de nuestras mentoras y las personas que nos formaron desde pequeñas para cocinar», recalcó Matilde.
Siguiendo la senda trazada por el autor del primer recetario moderno de comida italiana, Pellegrino Artusi, las autoras presentaron este volumen que reúne recetas familiares de la gastronomía siciliana, acompañadas de anécdotas que suelen compartirse con los parientes y amigos más cercanos, en la intimidad que ofrecen los vapores y el calor de la cocina.
“Cada receta va acompañada de una memoria, de un recuerdo, de cómo se inició esa receta o lo que se vivía en el momento en el que se estaba cocinando. Y eso es realmente bello”, aderezó Patrizia.
Matilde destacó que la cocina siciliana «se caracteriza por sus sabores intensos e ingredientes comunes (en Italia) como el pescado, las aceitunas y los tomates secos. Tiene muchas recetas a base de vegetales. La gastronomía siciliana cambia de ciudad en ciudad, es muy amplia. Pero nuestro libro se enfoca en las recetas que nos enseñó nuestro papá, con las que crecimos, ya que él era de Siracusa».
Así es como las recetas trasladan a los comensales y cocineros hasta esta ciudad ubicada al sudeste de Sicilia, donde la pasta es protagonista junto a otros platos e ingredientes locales. Las creadoras de Veneziano Gourmet incursionaron en la literatura para rendir homenaje a sus raíces, al legado que les dejó su padre y a las mujeres que les transmitieron su sazón: sus tías y su madre.
Para Patrizia, “todo el que lea ese recetario y haga (los platos) en algún momento, va a formar parte de lo que somos como familia, de la herencia que recibimos, del hecho de que nos hayan transmitido lo que se puede alcanzar y dejar en el otro a través de una comida”.
De ahí que decidieron dejar páginas en blanco «para quienes cocinen y deseen plasmar sus historias, sus vivencias y sus cuentos, si la receta quedó mejor. Esos momentos divertidos y apasionados que siempre surgen alrededor de una mesa», citó Patrizia en la presentación del libro.
Agregó que una vez le preguntó a su padre ¿cuándo estaban listos los tomates secos «y el dijo en una maravilloso siciliano, porque en la casa sólo se hablaba en dialecto sicialiano: ‘los tomates se tienen que sentir’. Asi nos enseñó a cocinar, a sentir… Se cocina con amor, se cocina con cariño y sobre todo con pasión. Asi nos enseñó a cocinar Emanuelle Veneziano… La vida no es para llevar, es para comer aquí».
La publicación editada, tanto en español como en italiano, contó con el respaldo y la promoción de la Embajada de Italia en Venezuela y el Instituto Italiano de Cultura de Caracas (IIC). El texto está disponible en librerías de la capital y en Amazon, con el sello de Ediciones Rubiano.