El Tiempo: nueva plaza para Baruta
En una ceremonia marcada por la colaboración público-privada, la alcaldía de Baruta, en conjunto con la joyería Gerais y bajo la gestión del alcalde, Darwin González, celebró la inauguración de la moderna Plaza El Tiempo, un espacio público que busca convertirse en un referente para vecinos y visitantes del municipio.
Ubicada estratégicamente en la Avenida La Guairita de Chuao, en la entrada del Hotel Eurobuilding y junto al mural de flores «Polski Folk,» esta plaza combina estética, cultura y significado. En su centro destaca un imponente reloj floral, considerado el más grande de Venezuela, cuyo mecanismo, que pesa más de 300 kilos, fue diseñado en la fábrica de relojes Centenario en Puebla, México, y trasladado a Venezuela en avión gracias a la colaboración de Copa Airlines y Grupo Gerais. La estructura representa no solo el paso del tiempo, sino también la historia y la esperanza de un municipio en constante modernización.
El reloj, inspirado en el famoso reloj de flores del Jardín Anglais en Ginebra, expresó el alcalde González, simboliza la importancia de valorar cada instante. “El tiempo ha sido uno de los conceptos más estudiados por escritores, filósofos, físicos y poetas. Más que una medida, el reloj tiene un profundo significado cultural y simbólico, representando desde el poder hasta la fugacidad de la vida y la muerte,” afirmó. “Hoy, en Baruta, tenemos nuestro propio tiempo y nuestro reloj floral, como un acto de celebración y reflexión.”
Durante la inauguración, el mandatario destacó que esta plaza no solo servirá como un espacio para el descanso y el encuentro, sino también como un símbolo de la recuperación y el crecimiento del municipio. “Esta plaza invita a compartir, a disfrutar al aire libre, a detenerse y admirar la belleza del entorno que nos rodea,” señaló González.
Con esta iniciativa, Baruta continúa su proceso de recuperación, modernización y embellecimiento, consolidándose como un municipio más bello, funcional y acogedor.
«Cuando terminamos de pronunciar futuro, la primera sílaba ya está en el pasado. Cuando digo silencio, lo destruyo, cuando hablo de la nada, se vuelve algo. Así como el amor, así de complicado y preciado es el tiempo,» concluyó el alcalde.
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